Los cambios en el impuesto a las ganancias significarán una mejora para el poder adquisitivo de 130 mil jubilados y pensionados que dejarán de pagar el tributo, y quienes continúen siendo alcanzados (30 mil personas) pagarán por montos menores, según pudo saber este diario de fuentes de Anses. Esto ocurre debido a que cuando se apruebe el proyecto de ley en el Congreso, se elevará el mínimo no imponible de 6 a 8 haberes mínimos, es decir, desde un ingreso que hoy se encuentra en 164.571 pesos.
Según estimaciones del economista Carlos Martínez, especialista en seguridad social, el dato para destacar es que entre los que efectivamente pagan Ganancias, el 80 por ciento dejará de hacerlo. Además, por la ley de movilidad, el mínimo no imponible se actualiza cada tres meses, cuatro veces por año, a diferencia de los trabajadores en relación de dependencia, en donde el piso se actualiza una vez al año.
Además, Martínez detalló que los jubilados que pagan el impuesto a las ganancias representan menos del 3 por ciento del total, debido a que se trata de un universo de 5,4 millones de personas, de las cuales más del 70 por ciento cobra la jubilación mínima. Según pudo saber este diario, la decisión del Poder Ejecutivo es favorecer a los jubilados y pensionados de haberes medios y altos que no pudieron igualar a la inflación con los aumentos del 2020, mientras que si lo hicieron las mínimas. Además, también venían de perder en 2018 y 2019.
Actualmente, los jubilados pierden el beneficio de estar eximidos si perciben otra renta, como podría ser cobrar intereses de un plazo fijo en pesos o un contrato de alquiler, debido a que así fue establecido durante el gobierno anterior. «Lo interesante del proyecto que se debate es que se propone la eliminación del requisito, entonces los jubilados podrán percibir otras rentas, sin resignar el goce del beneficio», explicó a este diario Marcelo Rodríguez, tributarista de MR Consultores. Será hasta la suma prevista de ingresos extras por 167 mil pesos.
Esta medida se da al mismo tiempo en la que el Gobierno promueve la formalización de los contratos de alquiler, a través del registro en la AFIP. «Esto hubiera generado un importante impacto en la carga del impuesto sobre los jubilados», explicó Rodríguez. Además, agregó que tampoco corresponderá esa deducción para quienes se encuentren obligados a tributar el Impuesto sobre los Bienes Personales, siempre y cuando esta obligación no surja exclusivamente de la tenencia de un inmueble para vivienda única.
Fuente: Página 12 Foto: Bernardino Avila